Cómo mejorar tu productividad mejorando tus ordenadores

Muchas pequeñas y medianas empresas no son conscientes de la gran cantidad de tiempo que pierden sin darse cuenta. Piensan que la causa son sus ordenadores, que por alguna razón no están funcionando a la velocidad a la que deberían, y lo aceptan con resignación pensando que no hay otro remedio, o no tienen dinero para comprarse otro ordenador.

Pero lo cierto es que en muchos casos estos problemas se pueden solucionar cuando aplicamos algunas técnicas para mejorar la velocidad de nuestro ordenador. Tenemos claro que cuando compramos nuestras computadoras en su momento funcionaban a una velocidad aceptable y lo cierto es que, en muchos casos, las malas prácticas, el exceso de programas y la falta de mantenimiento y limpieza son la causa principal de que los ordenadores no estén funcionando como deberían.

Por qué tus ordenadores funcionan mal

Las razones por las que tus ordenadores funcionan mal o son lentos pueden ser muy variadas:

• La memoria RAM es enormemente escasa para la cantidad de programas y aplicaciones que tienes instalado.
• A veces, los ordenadores vienen mal optimizados de fábrica, con un montón de aplicaciones que arrancan al inicio y hacen que el proceso de encendido sea más largo.
• Has instalado un antivirus que está mermando la velocidad de tu ordenador de manera significativa.
• Quizás hay algún troyano o virus que está en estos momentos actuando en tu ordenador, por lo que notas un funcionamiento mucho más lento. Se trata de aplicaciones malware que se están ejecutando en ese momento.
• Alguien se ha introducido en tu ordenador de forma remota y está utilizando recursos sin que te des cuenta.
• El hardware puede estar defectuoso o deteriorado y requiere reparación.
• No es tu ordenador lo que va lento, sino tu conexión a Internet. Sólo te va lenta la navegación, debido a múltiples posibilidades. Por ejemplo, que alguien esté utilizando tu red Wifi sin que tú te des cuenta y te esté quitando ancho de banda.

No todos los problemas se solucionan mediante un formateo, ni necesariamente hay que formatear un ordenador para solucionar todos los problemas. Pero, en todo caso, lo que hay que empezar a distinguir cuándo el comportamiento de un ordenador es normal y cuándo no es normal.

¿Cómo afecta esto a tu productividad?

Supongamos que llegas por la mañana a tu oficina, enciendes tu ordenador y empiezas a trabajar con el software que utilices habitualmente. Notas la lentitud y las complicaciones que te ofrece la máquina para hacer cualquier actividad. Tú mismo te vas desesperando y descubres que no obtienes resultados. Estás perdiendo productividad y cada día de trabajo se va perdiendo debido a tus ordenadores.

¿Son realmente los ordenadores el problema, o la falta de optimización? Lo cierto es que si quieres recuperar tu tiempo y tu dinero, tienes que empezar a ocuparte del mantenimiento informático de las computadoras de tu empresa, de modo que siempre puedan estar en perfectas condiciones para el trabajo.

Piensa que lo que podrías hacer en 1 hora, quizás acabes haciéndolo en 2 o 3 por culpa de que el ordenador tarda el doble de tiempo. Todo eso debe traducirse en términos de dinero que dejas de ganar, motivación que se te escapa por los cuatro costados y en un estado de ansiedad y enfado con las máquinas que hace que cada vez te produzcan mayor aversión.

Tus ordenadores deben ser la solución y no el problema. No te ajustes tú a ellos; haz que ellos se ajusten a lo que tú quieres hacer. Y si la cosa no funciona, pide información a nuestro soporte técnico para que te ayudemos a poder sacar el máximo partido a tu red de ordenadores.

Productividad y redes informáticas

Muchas veces tu productividad se pierde no por el mal funcionamiento interno de tus ordenadores, sino por la ausencia de una red informática coherente y orientada a la optimización del tiempo.

Cuando no dispones de los periféricos conectados en red con tus ordenadores (impresoras, fax, fotocopiadoras, escáner…), se pueden producir situaciones que también te hagan perder el tiempo.

Aunque hoy día puedes compartir información entre ordenadores a través de Internet, sin que haya una red cableada, lo cierto es que como mínimo sí necesitas una buena red cableada si quieres aprovechar al máximo tu conexión, ya que de esta forma la velocidad será mayor que si te conectas vía Wifi.

La conexión Wifi es importante, pero en una oficina donde trabajamos generalmente con ordenadores estáticos es mucho más importante disponer de una red por cableado estructurado. Todo esto teniendo en cuenta que, además de la velocidad, es mucho más segura una red por cable que una red inalámbrica.

En definitivas cuentas, que una de las asignaturas pendientes de tu negocio probablemente sea mejorar la productividad. Y gran parte de los problemas de productividad puede proceder de no disponer de unas herramientas en condiciones para trabajar de manera profesional.

Para no seguir en esta situación, creemos que cada día que pasa la bola de nieve se irá volviendo cada vez más grande. Tomar decisiones es el siguiente paso para seguir haciendo crecer tu negocio.

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