Cómo cuidar plantas de interiores

Tener plantas en tu casa puede embellecer el ambiente, purificar el aire en el interior de las habitaciones, y dar un toque de vida natural a espacios de oficina que puedan resultar demasiado grises por su cuenta.Incluso, dado que las plantas crecen y están en cambio constante, algunas personas las consideran una forma de compañía. Su cuidado puede ser muy fácil con una serie de consejos para mantenerlas saludables.

editarPasos

1. Asegúrate de que tus plantas reciban luz. ¡De verdad lo necesitan! Identifica si tienen suficiente luz natural a su alcance (lo ideal es colocarlas cerca de una ventana, con un plato debajo de la maceta para evitar que el exceso de agua llegue al piso). Considera comprar una luz especial para ayudarlas a crecer si no hay otras fuentes de iluminación disponibles.
   
2. Riégalas conforme lo vayan necesitando. Las plantas necesitan agua, pero no en exceso ni tampoco en cantidades insuficientes. Cuando riegues, vierta agua hasta que las primeras gotas se escurran al fondo de la maceta (¡siempre usa macetas con un orificio al fondo!) Averigua bien las necesidades de cada planta, que tan seguido deben regarse, la luz que necesitan: escoge una planta que se vea bien en tu casa pero que también se ajuste a los cuidados con los que te puedes comprometer.
   
3. Mántente alerta contra las plagas. En ocasiones las plantas atraen insectos u otros organismos que pueden alimentarse de ellas y debilitarlas. Algunas plagas pueden controlarse con pesticidas que se incorporan a la tierra húmeda, mientras que otras necesitan de cuidados especiales a las hojas. Busca información en internet; hay mucha disponible para combatir adecuadamente estas pestes.
   
4. Usa una buena maceta. Elige los diseños que más te agraden, los que mejor combinen con la decoración de tu espacio. El plato que coloques debajo será vital para que la humedad extra esté disponible abajo de la planta sin dañar el piso, aunque debes asegurarte que tenga bordes elevados para que el agua del centro no toque el fondo de la maceta directamente.
   
5. Riega la planta cuando notes que la maceta está muy ligera. Encontrar el balance adecuado entre humedad y períodos de tierra seca es vital para el cuidado de la planta, y puedes observar qué combinaciones de días y riego mejoran el aspecto de cada planta.
   
6. Averigua qué planta funciona mejor para ti. Aquí hay algunos buenos ejemplos de plantas domésticas:
   • Plantas para piso: Dracaena marginata (árboles dragón), ficus (tanto la variedad de hojas largas como la de hojas cortas), sanseveria (espada de Santa Bárbara), spathiphyllum (cuna de Moisés). Evita adquirir aves de paraíso, bambúes o helechos, a menos de que puedas conseguirles iluminación adicional y la humedad apropiada para todo el año. Recuerda investigar bien antes de comprar una planta que podría morir en las condiciones inadecuadas.
     
   • Plantas de mesa y ventana: kalanchoes, begonias, violetas, orquídeas (las orquídeas son de fácil cuidado aunque deberás rodearlas de follaje atractivo, porque florecen sólo una o dos veces al año). Aunque hay muchas plantas especialmente hermosas que normalmente crecen todo el año en exteriores, debes resistir la tentación de comprar una para tenerla dentro. No sólo morirá pronto sino que podría transmitir una plaga a tus otras macetas.

editarConsejos

• ¡Sólo compra plantas cuya apariencia sea saludable! Si una planta se ve enferma o raquítica, probablemente es demasiado tarde para salvarla, a menos de que ya tengas mucha experiencia en cuidado botánico. Sólo si se tratara de una planta muy rara o valiosa, podrías contactar a un especialista que te ayude a rescatarla.
• Pasar un trapo húmedo por las hojas de las plantas grandes, una o dos veces al año, puede ayudar a que se vean limpias y radiantes. Nunca uses abrillantador de hojas en su superficie superior, y aun menos en la parte inferior: bloquearás sus poros e impedirás que respire.
• Cambia la posición de tus plantas de vez en cuando, para que puedan recibir luz en todos sus ángulos. Asegúrate de que la luz no sea muy intensa: si al colocar tu mano junto a la venta unos minutos empiezas a no soportar el calor, entonces también es buena idea alejar un poco tu planta. También mantente atento en invierno, cuando el frío puede ser igualmente intenso junto a la ventana.
• Una vez que hayas adoptado con éxito plantas sencillas de cuidar, puedes intentar con especies más complicadas. Recuerda que puede haber grupos de interés en tu localidad o en Internet a los que te puedes acercar: seguro tendrán muchos consejos para ayudarte con los nuevos retos que te vayas planteando.

editarAdvertencias

• Algunas plantas pueden tener en sus hojas sustancias químicas que resultarían dañinas si una mascota o un bebé las muerde; por ejemplo, las nochebuenas o las amoenas. Asegúrate de investigar sobre las plantas que te interesa tener antes de comprarlas, para evitar cualquier complicación si tienes niños o animales en casa.

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Source: Wiki News